Salvar la vida amenazada

Es hermoso ver bajar de la montaña los pies del Mensajero de la P A Z.

En lugar de cantar:
 bajar de la montaña,
 podríamos decir:
Me sorprende subir por la montaña...

Acompañada por la Srt. Milagros (Mily), salimos de Salta a las 08 hs. en colectivo, pasando por los pueblitos hasta llegar a bordear los cerros. Paisaje agreste, triste y...¡al fín! llegamos a S. ANTONIO de Los COBRES. ¡Que sorpresa me llevé! De un pueblito, que así yo lo creía, a una ciudad en progreso. Ya parece la Capital de la Puna. Llegamos a las 13 hs. Las Religiosas: "SIERVAS DEL VERBO ENCARNADO" nos esperaban y nos llevaron para almorzar a casa de Dña Teófila que sabe acoger las visitas con la sencillez de los pobres. De tarde fuimos al colegio Secundario en donde nos esperaban los jóvenes de la Secundaria. Hermoso encuentro. En el patio se veían carteles con frases educativas y de compromiso juvenil. La Vicedirectora del VESPA nos pidió que fuéramos a su colegio. Nos encontramos con jóvenes mayorcitos y pudimos trabajar en equipos. Las Hermanas nos habían informado que entre los jóvenes había un ambiente depresivo. Esta información nos sirvió para hablarles sobre el valor de la vida y que el Buen Dios nos creó a cada uno diferente y con un plan a realizar y que ningun otro lo puede hacer. Pusimos énfasis en la vida con sus valores, que vivirlos nos plenifica y llena de alegría. Seguido, visitamos una familia con siete niñas, más dos nietos. Todas deseando de estudiar y la madre las apoya pues comprende que es lo mejor que les puede dar. La pobreza era muy visible y con el padre alcoholico problema que es muy común en las familias. Por la noche, se reunieron los padres de la Catequesis. Trabajaron en equipo con tres casos reales de " Trata de personas".  Informamos: En el año 2013 fueron 46.000 víctimas de la trata de personas. Esa es solo una parte de los 27 millones de hombres, mujeres y niños esclavizados para trabajar o para la industria del sexo. Esto genera cerca de 32.000 millones de dólares en ingresos para los traficantes.  En síntesis regresamos con alegría y con pena. ALEGRÍA, por haber podido transmitir mensajes de prevención y de vida. TRISTEZA, por ver una juventud en progreso material sin VALORES QUE LA PLENIFIQUEN. Las Religiosas (todas peruanas) nos dieron un testimonio de entrega, conocedoras de la realidad del pueblo y de los poblados que existen en las montañas. También ellas animan no sólo la Catequesis a todo nivel sino que al no tener Sacerdote dirigen las CELEBRACIONES DOMINICALES y también diarias en un hermosísimo templo y que están en proyecto para una capilla del SANTÍSIMO. Le doy gracias al Señor por haber permitido que viviera toda esa realidad. Nos pidieron que volvamos, y así lo deseo para estar con los más alejados. Para GLORIA DEL SEÑOR.

María Remedios Monge