«La Eucaristía se llama, con mucho acierto, el
sacramento del amor. Solo el amor de un Dios podría hacerse alimento de su
criatura, de modo que se realizasen las palabras divinas: "Que todos sean uno:
como tú, Padre, estás en mí y yo en ti"; o bien las de San Pablo: "Ya no vivo
yo, sino que Cristo vive en mí".» María de la Pasión
No hay comentarios.:
Publicar un comentario